dc.description.abstract | Este trabajo, a modo de texto reflexivo, se propone abordar a grandes rasgos la forma en que el ser humano aprende fisiológica y psíquicamente, para luego tener un acercamiento a la manera en que la corporalidad, como unión indivisible entre cuerpo y mente es indispensable en la formación, estudio y análisis de un proyecto de diseño, ya que este es el primer habitáculo, el cuerpo, el que se utiliza para conocer el mundo. Así mismo, el diseñador de vestuario parte del cuerpo mismo para leer contextos, requerimientos, funciones y otro tipo de información que le es posible asimilar por medio de la unión entre cuerpo y mente, por un proceso de recepción de estímulos que tenemos todos, por el cuál aprendemos diariamente, los sentidos. Es importante entender cómo aprendemos, de qué herramientas se sirve nuestro cuerpo para identificar estímulos y entender del mundo que nos rodea, para luego tener mejor comprensión de cómo este cuerpo que se modifica, se adapta y aprende, se relaciona con los elementos de su entorno, con objetos, en este caso el objeto vestimentario, que usa como extensión o búsqueda para suplir necesidades funcionales y comunicativas. El diálogo entre los sentidos y el entorno es constante, ya que estos son una respuesta fisiológica que se encarga de que el cerebro pueda percibir la mayor cantidad de variables posibles para adaptarse a ellas. Esta estimulación constante que recibe el cuerpo por medio de su entorno es la forma en que se da el aprendizaje, es precisamente la capacidad del cuerpo de adaptarse a los estímulos y guardar esa información para ocasiones próximas en que sea necesaria. | spa |