Resumen
Un objeto vivo es aquel que cumple con el propósito para el cual fue creado; cuando deja de ser útil es, generalmente desechado o reciclado. La reencarnación es una tercera opción que implica que el objeto se adapte para que cumpla una nueva función. Este término se toma por analogía con el concepto de reencarnación aplicado en humanos, asumiendo que al morir, el alma renace en un cuerpo nuevo. No se trata de afirmar o negar esa creencia ni mucho menos de afirmar que efectivamente los objetos tienen alma, sino de hacer un símil entre alma y vida, entre alma y función. Este proceso dará como resultado objetos hechos por aficionados y que expresan su estética particular y en muchos casos "colorida".