Abstract
El uso humano de artefactos en la cultura contemporánea, evidencia en los consumidores de los mismos, una serie de actitudes que vale la pena analizar. En dichas actitudes, entra en juego no sólo la dimensión del servicio y de la función para la cual están construidos, sino también la oculta dimensión teórico-científica que hace posible la realización de los aparatos y que, para nuestro caso como universitarios, suscita uno de los mayores y prioritarios intereses.