El paisaje en Antioquia (Patrimonio, turismo y publicidad).

Sin lugar a dudas el siglo XXI obliga a pensar y re-pensar las complejidades de todo orden referidas a los fenómenos ambientales. En ello va, para nuestro interés, lo referente al análisis y entendimiento de la geografía y lo que en ella se ha dado en nominar como paisaje. Desde las Ciencias Sociales (tan desprestigiadas en tiempos de pragmatismo económico), se debe de hacer un llamado a las Ciencias Naturales para que reconozca y repiense sus “modelos de análisis y de las complejidades ambientales, geográficas y paisajísticas, revisando los postulados universales de las ciencias naturales como unívoco pensamiento que fragmenta y descompone el paisaje y la geografía de acuerdo a sus necesidades específicas”. La ciencia entendida como conocimientos estancos fragmenta lo que debería estar ligado como un todo complejo. No se debe separar el ambiente (el paisaje) de los contenidos que lo hacen posible. Lo material, lo humano y lo que de ello resulta como hecho antropológico: la cultura y sus patrimonios. La cultura entendida como los “sistemas de adiestramientos cuyo fin es trasmitir a las generaciones siguientes contenidos cognitivos y morales importantes para la vida de la región” Así las cosas ¿qué trasmite el paisaje a las nuevas generaciones? ¿Cuáles son sus contenidos cognitivos? ¿Físicos, ambientales, sociales y culturales? ¿La cultura de la región y su paisaje que aporta para el bien-estar de sus habitantes? ¿Cómo y por qué integrar el paisaje a las prácticas públicas? ¿A la promoción y difusión del paisaje con un interés comercial que lo aprecie y lo conserve? ¿A la publicidad que prevenga los riesgos de un turismo no depredador con el paisaje? ¿Con el medio ambiente? Dichos interrogantes, entre otros, no serán totalmente resueltos aquí, se trata de derroteros que merecen estudios y prácticas institucionales de mayor calado. Ello no impide llamar la atención sobre este asunto que trataremos de hacer visible en sus aspectos más gruesos en las páginas que siguen.