Transporte canino

La investigación sobre el transporte canino parte de la necesidad cotidiana de las personas que poseen perros, que los transportan en un vehículo, y están pendientes de su comodidad y de las necesidades espaciales de los demás ocupantes del vehículo; debido a esto se tuvieron en cuenta, las condiciones en las que se traslada el animal y la existencia de una normativa al respecto. Se hace necesario entonces, establecer la relación sistémica usuario (U), producto (P), contexto (C) y actividad (A) para definir cómo influye el tiempo y las dimensiones del habitáculo en el comportamiento del canino. Se tiene presente cómo trabaja el cuerpo animal, al momento de iniciar, durante y al finalizar la actividad de transporte en los vehículos coupé. Teniendo en cuenta las subvariables: morfología en cuanto a dimensiones y formas, biomecánica que estudia los movimientos, posturas y esfuerzos al momento de la actividad, complementando con la etología que es el estudio del comportamiento animal. En el contexto local, no hay suficientes soluciones desarrolladas al respecto, y en el mercado automovilístico no se ofrecen los suficientes aditamentos que permitan tener controlados y seguras tanto a las personas como a los caninos partícipes de esta actividad. Por causa de este desconocimiento y falta de uso de elementos que protejan y sean cómodos para el canino y para su propietario, se aumenta el riesgo de accidentalidad que implican a estos dos usuarios u otros actores de la movilidad. El fin de la investigación es analizar el tema del transporte para que se tengan en cuenta las normativas de seguridad, las variables ergonómicas asociadas al proyecto, la usabilidad y estética indispensables para el desarrollo de proyectos que brinden a los ocupantes del habitáculo, confort y bienestar, incrementando su seguridad y calidad de vida como propósito principal del proyecto.