dc.description.abstract | En el mundo postmoderno, han aparecido unos fenómenos que han provocado una crisis entre la fe y la vida, entre la ciencia y la religión, entre el desarrollo y la espiritualidad; fenómenos que se convierten en retos y desafíos para la Iglesia, y que el Papa San Juan XXIII, ha querido buscar un antídoto para darle solución a estos obstáculos, por medio de un Aggiornamento, una puesta al día de la evangelización y que el Papa San Juan Pablo II, lo ha denominado la nueva evangelización, que con sus métodos, ardor y expresiones, hacen que la Iglesia pueda entrar en diálogo; ellos son: globalización, la secularización, el capitalismo, la nomofobia, la cibercultura, el relativismo, el pluralismo, el homo numericus, las mass media y la ciencia. La Iglesia a través de la sagrada escritura, la tradición y su magisterio, ha encontrado unos conceptos teológicos como bases para fundamentar estos desafíos y abrir un diálogo entre estos fenómenos del mundo postmoderno. Estos principios son: la fe, el discipulado, la misión, el profetismo, el kerigma, la innovación espiritual, la liturgia, la diaconía, la koinonia y el diálogo. Estos principios teológicos deben ser coherentes con la vida, y desde ella un cambio que llegue a pasar por la conversión personal a la conversión pastoral, eclesiástica y la ecológica; anunciando con hechos y a imagen de Jesús un evangelio vivo. Que el evangelizador sea capaz de actuar como actuó Jesús, de pensar como pensó Jesús, de amar como amó Jesús. Que la nueva evangelización deje de ser una idea, una predicación, un discurso, una clase y pase a ser una revitalización del mensaje evangélico, para vivir como vivió Jesús encarnado en el mundo de hoy. En pocas palabras es poner al día el evangelio y leerlo en clave de siglo XXI. | spa |