dc.description.abstract | La corrupción deteriora el papel de las instituciones públicas en la sociedad y afecta la moral tributaria de los contribuyentes (Bird, Martínez y Torgler, 2008). Además de ello, la corrupción lleva a que el gasto público se destine a usos ineficientes y poco productivos para el desarrollo económico (Capasso et al., 2021). Un objetivo esencial de la administración fiscal es asegurar la máxima disposición a pagar impuestos de los contribuyentes. Mientras más corrupción exista, los impuestos recogidos serán bajos y grandes sectores de la economía serán informales y escaparán a los impuestos (Tjen y Evans, 2017). Existe una literatura que asocia el desorden fiscal con el delito. Según Balthazar (2012) y Trejo-Alonso (2021), cuando un espacio urbano se encuentra desatendido, la comunidad tiende a no interesarse en el bienestar colectivo y los delitos aumentan. Es decir, el crimen puede estar asociado a ciertos contextos y ciertos ambientes estimulan más el crimen que otros. | spa |